No es necesario verte para amarte, no es necesario verte para tocarte, solo sintiendo que estamos juntos es suficiente para mi, logras que mi espíritu vibre, como vibran las voces de las aves al cantar, pero no dejando de ser el canto lacónico de los mas inefables sentimientos.
Viajamos a los confines de la tierra de la mano, tus palabras, tus consejos, tus abrazos, todos los plasmas en mi mente cuando caminamos, dejándome la sabiduría eterna como regalo, con esto afirmas que no es necesario verte porque a diario estas a mi lado, dándome la certeza de que todos somos tus hijos amados.
No es necesario verte para agradecerte los instantes de alegrías y tristezas que hemos compartidos siendo através de ellos más que un padre, más que un hermano, socorriéndome de las profundas aguas de la angustia, pero no abandonando el dolor que ha quedado en mi de fallidos quereres, solo sé que no es necesario verte sentir tu amor demostrado a través de tu propia crucifixión.
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